sábado, 10 de diciembre de 2011

Incendio forestal

Incendio forestal en Cubilàn destruyò flora y fauna

Parte del bosque protector del Cubilàn que fue incendiado
Cerca de 30 hèctàreas del bosque protector del Cubilàn del cantòn Bibliàn,provincia del Cañar fueron devastadas por incedio forestal,que se produjo el 20 de octubre, por causas que aùn no se han deterinado.
Las llamas se propagaron con rapidez por la fueza del viento y terminò con una gran cantidad de vegetaciòn,aves y animales salvajes existentes en la zona. Estas pusieron en riesgo algunas viviendas que se han acentado en el àrea de influencia del bosque protector.
El flagelo fue apagado durante dos dìas con la colaboraciòn de los bomberos de las ciudades de Azogues y Bibliàn, miembros del ejèrcito ecuatoriano, grupo Calderòn y la Secretarìa Tècnica de Gestiòn de Riesgos del Cañar.
El 22 de octubre las autoridades y tècnicos de la Direcciòn de Medio Ambiente(MAE) acudieron al lugar para evaluar los daños ocasionados y observar que no existan otros focos de incendios que atenten nuevamente el bosque secundario, chaparro,flora y fauna.
En el sector de San Camilo, lugar donde se originò el incendio forestal se desarrollan una gran cantidad de plantas nativas como: la valeriana,guarongos,trencillas y niqueles de varias clases; asi como tambièn animales menores salvajes como los conejos liebres y cuyes. En esta zona existen quebradas pequeñas que son utilizadas para consumo y actividades agrìcolas por los habitantes del sector.
Segùn el criterio de Carmen Guamàn, moradora del sector de Babarcote-Charon, que colinda con el bosque del Cubilàn, el incendio se habrìa producido no por la mano del hombre, sino producto de los desechos sòlidos reciclables, como las botellas de vidrio o residuos de este material, que son desechados al bosque por personas imprudentes que visitan el lugar. Los vidrios al estar en contacto con el sol y el pajonal seco se calienta en forma ràpida y toma temperaturas avazadas, lo que hace que se produzca el fuego y por ende los incendios forestales.
Melvin Alvarado,director provincial del MAE informa que ha mantenido reuniones con los miembros de la Secretarìa Tècnica de Gestiòn de Riesgos, cuerpos de Bomberos de Azogues y Bibliàn, miembros de las fuerzas armadas para establecer estrategias que permitan determinar a los responsables del incedio forestal del bosque protector del Cubilàn. La Fiscalìa del Ambiente del Cañar no ha intervenido todavìa en el caso, debido a que no existe la denuncia de la direcciòn provincial del MAE.

Crónica historia de la calle Bolivar

Simón  Bolívar, calle emblemática y principal arteria de Azogues
Sector de las Cinco Esquinas.
Uno de los distritos más antiguos de la ciudad de Azogues, es el Barrio Sur Simón Bolívar, ubicado en la principal arteria de la capital cañarense y que en la actualidad nos muestra un inmenso progreso, si lo comparamos con tiempos pasados.
El sector, hasta hace 50 años más o menos, fue conocido como el “Panteón Viejo”; pues en antaño, había sido cementerio público, particularmente en las lomas que quedaban entre lo que hoy son las calles José Joaquín de Olmedo al oriente y la Luís Cordero al occidente; pero principalmente alrededor de la Bolívar, desde la actual General Enríquez hasta la avenida Aurelio Jaramillo.                 
Olmedo Palacios Lituma, que es descendiente de una de las primeras familias que se asentó en este sector nos cuenta que el crecimiento hacia el sur de la ciudad, hizo que el “Panteón Viejo” fuera  rodeado de nuevas construcciones que le iban centralizando, perdiéndose la estructura urbanística de la vieja  ciudad. Las disposiciones municipales y sanitarias, obligó a los deudos a sepultar los cadáveres en el panteón del norte, ubicado en terrenos en los cuales hoy, se encuentra  gran parte  de la infraestructura física del  Instituto Luís Cordero. Después y como solución para varios años, se construyó el “Cementerio Municipal”, que actualmente se encuentra  situado en el sector de Zhirincay.  
“En el barrio Simón Bolívar,  predominaban las casitas  con adobe y en otros casos  de bajareque con techados de teja, pisos bajos en tierra o entablados, al igual que los tumbados y pisos superiores: Las puertas y ventanas igualmente de madera, en gran parte elaboradas de forma rústica y simplemente pintadas. Otras viviendas se hacían  con pilares y vigas de palo labrado y las paredes de tabla; hay pocas  que aun persisten y que se consideran reliquias patrimoniales como las que están situadas en las calles Simón  Bolívar y Tenemaza, en la General Enríquez y Bolívar”.
José Ávila Reinoso da testimonio de las riquezas inigualables que poseía este sector, hoy convertida en la principal arteria y zona comercial de la ciudad de Azogues.
Este ciudadano cuenta que la mayoría de calles de la urbe eran en tierra sin tratamiento alguno y que  luego se fueron lastrando con materiales de la zona; en el caso particular de la calle Simón Bolívar señala que se  reconstruyó con el empedrado, en donde se utilizó las piedra del río Burgay y que después se usó  el adoquín, que fue  fabricado en las parroquias de  Cojitambo y Chuquipata, con lo cual adquirían un aspecto hermoso y digno para la época.
La Bolívar, por varias razones ha sido y sigue siendo la principal vía de la urbe. En épocas anteriores fue paso obligado para llegar al Hospital “Cuatro de Noviembre”; al Campo Santo actual y como ruta única de enlace con Charasol, Chuquipata, Cuenca, Paute, Guacaleo etc.
Algunos moradores del barrio sur, ante el reducido número de vehículos en la ciudad, ocupaban  las calles para los juegos populares, especialmente “los toctes”  “la raya” “las peleas de gallos finos” entre los mayores; después se popularizaron el Vóley Ball y el índor fútbol que se practicaban  especialmente entre sábado y domingo; sin embargo el aumento acelerado del tráfico motorizado, limitó la distracción popular a la voluntad de los propietarios de predios improductivos.     
En esas circunstancias, entre los años de 1957 y1960, los jóvenes consiguen en préstamo una parte de la propiedad del señor Miguel Quezada Cáceres, donde hoy existe la Casa de la Cultura; con esfuerzo propio logran el terraplén necesario para una cancha de vóley que fue utilizada por algún tiempo.  La venta del sitio hizo que el propietario cediera otro pedazo de iguales proporciones hacia el sur de la ciudad, donde después se construyó la casa del señor Luís Zhindón. En ese transcurso, los deportistas planifican la conformación de un club, que se concretó entre enero y febrero de 1964, con la asistencia de varios moradores del sector; en una casita pequeña y vetusta de propiedad del mismo señor Miguel Quezada; en histórica sesión se constituyó el antiguo y prestigioso Club Social, Cultural y Deportivo “Simón Bolívar”, expresa Teodoro Lucero Palacios. 
Las edificaciones de ladrillo y bloque, con estructuras de hierro y cemento  fueron modernizando la imagen sencilla pero hermosa del antiguo barrio; así mismo las calles del sector cambiaron al asfalto, al igual que varias vías de la urbe.


 Miembros del Club Simón Bolívar.
Por permanente gestión de los Directivos, el 9 de abril de 1997 la  Municipalidad de Azogues, resuelve “Donar al Club Social y Deportivo Simón Bolívar” un cuerpo de terreno de su  propiedad, ubicado entre las calles Bolívar y Emilio Abad, destinado a la construcción de la sede social de la entidad donataria y para servicio de la colectividad.
Se logró la elaboración de planos y estudios de factibilidad de suelos a cargo de los miembros del Club: los  arquitectos Eugenio Calle Yumbla,  Eugenio Morocho Quinteros, Paulino León Cáceres y la colaboración del ingeniero. Bolívar Coronel.
El Club intenta por todos los medios conseguir los recursos para la construcción del edificio; sin embargo, por el alto costo se acudió a las instituciones públicas como el Consejo Provincial del Cañar, en la Administración del ingeniero Diego Ormaza y en la  Municipalidad, en la alcaldía del doctor Víctor Molina; dichas entidades asignaron ciertas cantidades para el propósito señalado; sin embargo, la disposición constitucional y  legal que prohibía a las entidades públicas invertir en obras de instituciones de carácter privado, obligó prácticamente al Club Simón Bolívar, a reintegrar al Municipio mediante Escritura Pública aclaratoria, el terreno de su propiedad, para que en base a un Convenio Marco mantenido entre el Consejo Provincial y la Municipalidad, sean las dos entidades las que construyan ya no la sede social del Club sino “La Casa de Bolívar”, sin impedimento legal alguno.
Trabajos de desbanque y cimientos fueron ejecutados en el 2004; pero a pesar de gestiones efectuadas por el Club y el barrio Jurídico Simón Bolívar, la obra está abandonada. Sin embargo, la gentileza y  cumplimiento de las aspiraciones populares por parte del alcalde Eugenio Morocho Quinteros, los concejales; el  prefecto  Santiago Correa y consejeros; se tiene la evidencia del pronto reinicio de la esperada construcción, con partidas asignadas en sus respectivos presupuestos.
Continuando con la historia del principal ícono vial de Azogues, les cuento que unas de las familias más antiguas que tomaron asentamientos en la calle Simón Bolívar, de norte a sur fueron: Salinas León; Ávila; Srta. Tránsito Cáceres, Herrera Molina, Idrovo Palacios, Molina Encalada, Flores Solano, Luna Lucero,  Calle León, Navas Sacoto, Morocho Ortega, Quezada Carrasco, Lucero Palacios; Ávila Riqueti, Salinas Sacoto,  Velecela Fajardo, Esquivel Palomeque, Palacios Lituma, Minchala Naula, Vargas Vásquez y Espinoza Andrade.

Como tradición, este barrio ha sido protagonista de varios programas festivos, por Navidad, 6 de Enero   y  particularmente en las fiestas novembrinas, en las que se realizaba actos sociales, culturales, deportivos que culminaban el 5 de noviembre, con el famosísimo “Bolivarazo” (baile popular con excelentes orquestas del país).  


Calle Simón Bolívar en la actualidad.
El presidente de la Casa de la Cultura Eduardo Crespo también nos entrega aportes muy importantes y significativos de lo que fue y es en la actualidad la calle Simón Bolívar.
“Esta arteria a sido y es el camino fundamental, donde todas las generaciones de azogueños han transitado, viendo nacer y crecer la ciudad. Es muy difícil destacar la fecha en donde esta calle se convirtió en la principal arteria de la ciudad, sin duda, pienso que se dio desde cuando se posesiona el primer asentamiento urbano”.
Durante decenas de años la calle Bolívar ha sufrido constantes cambios y ha dado pasos muy significativos en el comercio y desarrollo urbano de la ciudad de Azogues, pero también es un testimonio, de como su patrimonio ha desaparecido.
Para Eduardo Crespo, las edificaciones patrimoniales hasta hace una década atrás representaban al “Azogues de ayer”, por su arquitectura popular, que le daban a la ciudad un aspecto pintoresco y agradable.
Las costumbres y tradiciones hacían de Azogues, una ciudad rica en expresiones culturales, donde se valoraba mucho el vecindario, la amistad y la familiaridad; de ponto todas estas formas de vida cambió, a lo mejor por lo que recibió los contingentes económicos del exterior, producto de la migración y dejó escapar ese paisaje urbano popular con las edificaciones modernas, construidas de cemento y hierro.
En la actualidad existen poquísimas casas patrimoniales a lo largo de esta calle, que datan de los años 50, que se encuentran ubicadas en su gran mayoría entre las calles Bolívar y 10 de Agosto, 3 de Noviembre y Solano; una de estas reliquias patrimoniales que se conservan actualmente fueron de las familias, Ramírez, García, Sacoto, Novillo entre otras. A pocos pasos del parque de “El Trabajo” se encuentra también una edificación donde funciona actualmente la Dirección de Salud Pública.
Toda la cuadra de la calle Benigno Malo hacia la Francisco Carrasco se  mantienen joyas patrimoniales que guardan en gran pate el estilo y  arquitectura de antaño; aquí se observan las viviendas patrimoniales de las familias Romo, Molina, Alvarado y la infraestructura del Banco de Fomento.
Actualmente la calle Simón Bolívar presenta otra imagen, se ha convertido en un referente del desarrollo comercial y urbanístico. En esta vía se realizan todo tipo de actividades de carácter cultural, deportivo, marchas, desfiles y caminatas. Aquí se ha posesionado el asentamiento de la banca privada, como: el Pacífico, Internacional, Fomento y Bolivariano, así como de entidades públicas como: La Casa de la Cultura Benjamín Carrión, Empresa Eléctrica, Ministerio Fiscal, Corporación Nacional y Telecomunicaciones, Ministerio de Medio Ambiente, Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda y otras edificaciones privadas, con  arquitecturas modernas.